Quizás nunca observas. Y tan solo ves el mundo tal cual.
Quizás nunca escuchas. Y crees real todo cuanto has oido.
Quizás nunca sabrás acariciar. Pues todo cuanto has tocado es vacio.
Quizás nunca saboreas. La miel solo la aprecia el humilde y honrado.
Quizás nunca respiras el aroma. La verdadera fragancia solo esta reservada
para quien sueña.